Haz como el águila
¡Cuán aventurados somos los hijos de Dios! ¡Qué hermoso es que elDios del Universo y el Creador de todo lo creado es por nosotros y,está con nosotros! ¡Cuánto nos regocija el tenr la certeza de que elDios que predicamos vive y es real! Podemos ver cómo se manifiestaa nuestras vidas y toma control de todos nuestros asuntos, cuandose lo permitimos. Vivimos la realidad de ver cómo nuestrascircunstancias, aún las más adversas, son convertidas en bendición,cuando confiamos. Clamemos unánimes al Dios del cielo para que serevele a aquellos que aún permanecen en tinieblas y puedan éstostambién disfrutar de las bendiciones que, a través de Jesús, Diostiene para ellos.
Es esta relación la que Dios dispuso para todos, pero desgraciadamente, no todos la consideran. El humanismo ha alcanzado un arraigo tan profundo en la mente de tantos que, hayquienes se consideran tan grandes, poderosos y autosuficientes comoDios mismos. Con su boca invocan su nombre pero con sus hechoslo niegan. ¡Hay de aquel que olvida de dónde vino e ignora haciadónde va.
Todos somos testigos de los tristes acontecimientos que estánocurriendo en cada una de las naciones, tanto en el gobierno comoen la sociedad en general, incluyendo las iglesias; cosas, algunas de las cuales, jamás pasó por nuestra mente que veríamos. ¡Todavía hay quien pone sus esperanzas en el gobierno y en otras autoridades, aún cuando años han estado observando la incapacidad de éstos para cambiarel rumbo de las cosas, para bien.
"Es hora de alabar a Dios, es hora de glorificarle, es hora de decirle:Te amo, es hora de invocar Su nombre." Así dice la canción, palabrasque resaltan, cual mandato obligado, constituyendose en la salida oescape ante la vorágine que supone el mover de la sociedad en lasdiferentes naciones, incluyendo la mía. es hora de considerar el refugioy escapar cada cual por su vida, quriendo significar que nada ni nadieen esta tierra podrá impedir que lo que está escrito se cumpla.Solamente aquellos que se dispongan a entrar en el Arca de la savación,JESÚS, podrán escapar y encontrar la seguridad que Dios ha prometidoa los que le reciban como salvador y Señor de sus vidas. "que siconfesares con tu boca que Jesús es el Señor, y si creyeres en tucorazón que Dios le levantó le levantó de los muertos, serás salvo.Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca seconfiesa para salvación" Romanos 10:9-10.
Haz como el águila que vuela a las alturas sólo, buscando su refugiodonde sabe que ha de encontrarlo, no así los cuervos que vuelan enbandadas, haciendo de los que le acompañan su seguridad.
Jaime